Los delegados denuncían que el hombre comentó que se sentía mal, pero lo obligaron a trabajar y le impidieron que se aísle como exige el protocolo de seguridad sanitaria.
Héctor Castro, delegado de COTO de la sucursal de Retiro, denunció que la empresa de supermercados obligó a un empleado a trabajar pese a que se sentía mal y terminó contagiando a su esposa que murió. El contagiado, a quién le impidieron aislarse, ahora está internado en estado delicado.
"Nuestro compañero le decía a su jefe que se sentía mal y él le prohibió que se aislarla diciéndole que lo necesitaban trabajando. Su mujer ahora falleció y él sigue internado", denunció Castro.
El delegado, que fue amenazado de muerte, además habia acusado que «la empresa no aísla a la gente como debe, ya tenemos 45 contagios».
En diálogo con el programa de radio Crónica Anunciada, que se emite por FM Futurock, Castro aseguró: "A la empresa no le importa la vida de sus empleados, esta pasando en muchas sucursales", y agregó: "Los compañeros denuncian que a los que tienen que aislar se lo computan como días de vacaciones".
"Yo hice la denuncia en mayo y me apretaron las autoridades para que la retirara", concluyó el delegado de COTO.
La denuncia que había hecho Coto: