Los ajustes de tarifas en el año fueron impedidos como condición para llegada de subsidios. Las empresas locales ya reclamaron al SITU el estudio de costos.
Las tarifas de servicios públicos tendrán un reacomodamiento el próximo mes, y en el caso del transporte público, el Ministerio de Transporte de la Nación confirmó que en las primeras semanas del 2021 habrá aumentos.
“Esperamos terminar de analizarlo en el transcurso del mes de diciembre, para aplicarlo en los primeros meses del año próximo”, dijo el ministro de la cartera Mario Meoni, a propósito del análisis en conjunto con la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires, para determinar los precios del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).
Al mismo tiempo, prevé ir reduciendo los subsidios que se destinan al segmento.
En el caso del interior del país, cada jurisdicción tiene potestad para determinar su costo. Ocurre que a principios de este año, el gobierno nacional anunció el congelamiento por 120 días de las tarifas de colectivos y trenes en el área metropolitana, e invitó a las administraciones provinciales a replicar su decisión, para diseñar un nuevo esquema que permita fijar un precio de referencia para el costo de los boletos en todo el país. La pandemia frenó el objetivo de conformar esa tarifa plana, y aumento de subsidios durante el año, frenaron transitoriamente cualquier actualización del boleto, que en el marco de la cuarentena y la caída de cortes de boletos hasta casi 80%, no hubiese representado incrementos significativos de recursos para las empresas prestatarias del servicio.
Pero en las últimas semanas, a medida que se fue recuperando la movilidad urbana en las ciudades, y que la inflación volvió a acelerarse, se instaló nuevamente el debate de la suba del boleto de colectivo.
En Santa Fe, hace 10 días ingresó una solicitud de ajuste tarifario del boleto urbano de colectivos, elevado por las empresas que brindan el servicio (Autobuses Santa Fe, Empresa Recreo y Ersa Urbano): a un valor de 51 pesos; hoy la tarifa plana del servicio cuesta 28,90 pesos.
En Rosario, en el marco de un rediseño del sistema de transporte, el costo técnico dio 73,81 pesos; actualmente el valor del boleto es de 32,50 pesos. La particularidad en esa localidad es que el servicio es mixto, con prestación a cargo de privados y del Estado municipal.
Corrientes y Mendoza evalúan en estos días similares planteos de reajustes.
En el caso de Paraná, las empresas Mariano Moreno y ERSA elevaron un pedido formal, por Mesa de Entradas de la Municipalidad, para que se reúna el Órgano de Control del Sistema Integrado de Transporte Urbano (SITU), con el objetivo de que evalúe el costo operativo del servicio. Ello supone medir en una ecuación, los recursos que hoy se obtienen por recaudación propia (en base a un nivel de uso del servicio que aún no alcanza un tercio del movimiento habitual), y las compensaciones y subsidios que otorgan Nación y Provincia.
El último ajuste del boleto se dispuso a comienzos de agosto de 2019; desde entonces, el boleto general tiene un valor de 29 pesos. El resto del cuadro tarifario vigente está compuesto por un boleto primario a 2,90 pesos; Secundario a 7,25 pesos; y Terciario y universitario a 8,70 pesos; el boleto obrero a 18,85 pesos; y el jubilado a 13,05 pesos.
Por la cuarentena, el uso ha sido nulo de parte de los estudiantes, y hasta hace pocas semanas se desalentó por ser riesgoso como foco de contagio del Covid-19, estuvo circunscripto exclusivamente a trabajadores esenciales, y personas de bajos recursos que no cuentan con otro modo de trasladarse en la ciudad. Algunas de ellos son las que acceden a la Tarifa Social, con un descuento del 55%.
Si bien la solicitud fue elevada a comienzos del mes pasado, el SITU –organismo creado por Ordenanza N° 9.462– no fue convocado. En ese ámbito participan ediles de los distintos bloques legislativos, funcionarios del Ejecutivo, representantes de las empresas concesionarias del servicio (Mariano Moreno y ERSA), la Defensoría del Pueblo, y especialistas contables de costos.
Con el fin de año encima, resulta probable que el análisis se traslade al inicio de 2021, siguiendo los lineamiento del gobierno nacional.
El transporte urbano de pasajeros en Paraná cerrará el año con un nivel de pasajeros que marcará un piso histórico: no llegará siquiera a los 10 millones de usuarios en el año.
La pandemia hizo estragos, con caída abrupta de la demanda desde fines de marzo, pero a ello se le suman casi 80 días sin unidades en las calles–con una medida de fuerza por salarios, que fue de 50 días consecutivos– que dejaron en evidencia las dificultades históricas del servicio público en la ciudad.
Fórmula de ajuste atada a la inflación y a los salarios
Atadas a la inflación y al salario, es la fórmula que propone el gobierno nacional para ajustar las tarifas del transporte público en el AMBA, y que sean una referencia para el resto del país.
Bajo esa ecuación se pretende adaptar el costo técnico de la tarifa, que históricamente ha sido de 80 centavos de dólar, lo que significaría hoy unos 65 pesos. Pero llevar a ese valor, es reducir aún más su uso.
Pero el gobierno se propone retomar el rumbo frenado por la pandemia, para reducir los subsidios, acorde al proceso iniciado en 2019, en que Nación se desligó de las distintas líneas de subsidios existentes desde hacía más de una década, y que sean las provincias o ciudades quienes atiendan los déficits de cada sistema.
Para 2021, los recursos asignados para compensar al transporte, están por debajo de la previsto por inflación.
Fuente: UNO