Los vocales del alto cuerpo enviaron una carta a la asociación de magistrados en la que expresaron que no van a expedirse respecto del incidente callejero que protagonizó a Emilio Castrillón y que si pretenden que se le imponga una sanción disciplinaria deberían realizar una presentación ante la Comisión de Juicio Político.
El Superior Tribunal de Justicia (STJ) le respondió a la asociación de magistrados, el gremio de los jueces entrerrianos, que no va a expedirse respecto del affaire que involucró al vocal Emilio Castrillón y que si pretenden que se le imponga una sanción disciplinaria deberían realizar una presentación ante la Comisión de Juicio Político.
El alto cuerpo se reunió este lunes un acuerdo especial para tratar una carta remitida por la Asociación de la Magistratura y la Función Judicial en la que denunciaron que Castrillón “remitió desde su teléfono personal vía WhatsApp mensajes de hostigamiento a dos miembros de la comisión directiva” de la entidad, la presidenta Gabriela López Arango y la vocal María Andrea Morales, reprochándoles una declaración pública en la que el gremio de los jueces expresó “su repudio ante los hechos violentos sucedidos en la ciudad de La Paz”, a raíz de la pelea callejera que protagonizó Castrillón con los dueños de un kiosco al lado de su casa luego de que les pidiera que bajaran la música.
La asociación de magistrados pretendía que el STJ “disponga la apertura de una instancia disciplinaria en la que se evalúe la conducta” de Castrillón.
Pero la respuesta, aunque en un tono cortés, rompe los moldes de la cordialidad. En una carta firmada por el presidente del STJ, Martín Carbonell, señaló que el alto cuerpo no tiene facultades ni atribuciones para sancionar a un vocal.
La carta surgió de una reunión que contó con la presencia de los nueve vocales en un acuerdo especial –Susana Medina de Rizzo lo hizo en forma virtual, como cada vez que se reúne el cuerpo desde que denunció a Castrillón por violencia de género–.
En la misiva, Carbonell le hace saber a la asociación de magistrados que de las atribuciones generales de superintendencia que le otorga la Constitución Provincial al STJ “no emerge potestad disciplinaria que pueda ejercer el alto cuerpo respecto de sus integrantes, estando solo prevista la misma respecto de empleados inferiores del Poder Judicial” y que tampoco la Ley Orgánica del Poder Judicial le asigna la potestad sancionadora, sino el contralor de la conducta de todos los miembros del Poder Judicial en cuanto al desarrollo de la actividad judicial y al ejercicio de la función.
“Por otra parte, es especifica atribución del Poder Legislativo la de juzgar en juicio político a los miembros del Superior Tribunal de Justicia, no es de resorte de este tribunal evaluar previamente, como Usted sugiere en sus líneas, si se está en una situación determinada frente a un caso que podría, o no, dar lugar a la remoción de un vocal, para en este último caso someterlo a la pretendida potestad disciplinaria”, señala la misiva.
En otras palabras, el STJ le señaló al gremio que la conducta de los vocales corresponde que sea analizada por la Comisión de Juicio Político y que es en la Cámara de Diputados donde deben hacer las presentaciones en ese sentido. La respuesta sugiere un respaldo del alto cuerpo a Castrillón y un cachetazo al gremio.
En cuanto al incidente callejero que protagonizó Castrillón, el STJ también tomó distancia y consideró que esos sucesos están siendo investigados por el Ministerio Público Fiscal y corresponde “estarse a las resultas de las respectivas investigaciones”.
Fuente: Página Judicial