Ir al contenido principal

Mantener viva la conciencia en los tiempos del coronavirus

A la antigua, Soledad vuelca en papel lo que su conciencia le dicta. Fue durante el pasado 24 de marzo, en un nuevo día de la Memoria por la Verdad y la Justicia aunque atípico por lo que todos ya sabemos. El confinamiento deja libre a las palabras que si vienen del alma y la historia de una militante territorial, siempre es bueno detenerse y soñar. 


Esta compañera impregnada de militancia apasionada dentro de la historia del peronismo firma y afirma, que su pasado de lucha volvió a tener anclaje popular con Néstor y Cristina. “Te imaginarás lo que la morocha representa para mí”, subraya con un guiño a la reivindicación de la mujer en el poder y me dice, “como Cristina, nadie”. 

Soledad Vergara ha contribuido a la organización desde distintos sectores del Peronismo. Los que la conocen saben muy bien que el espacio que siempre ensambla mejor, para ella, es el barrio. Desde allí construye aspiraciones colectivas. 

Su aporte militante es muy extenso, tanto como valioso. Hoy forma parte de la Corriente Nacional “1ero la Patria” en Paraná y sostiene que “organizarse continúa significando el mojón de cada espacio de construcción popular. 

Es tan orgánica como pragmática, es tan peronista como Kirchnerista, sin contradicciones. Por lo contrario, abrazada a las luchas de los 30 mil sigue dándole vida a esos sueños de Patria Libre, Justa y Soberana a los que también encierran los cánticos de Revolución con más democracia, Inclusión e igualdad de oportunidades. 

“La Sole” nos regala una pequeña reflexión tan pequeña como visceral, quimera repleta de honesta llaneza. 

Palabras que despiertan, sacuden la modorra, corren el velo a los verdaderos enemigos de la Patria, y tienden brazos fuertes para la necesaria avenencia en estos tiempos de coronavirus. 


24 de marzo de 2020 

“Hoy los luchadores optimistas, debemos comprometernos y agilizar esta oportunidad”. 

“Que el Estado funcione, no solo depende de sus intenciones. Debe escuchar al pueblo organizado”. 

“Esta pandemia demostró energéticamente, ¡¡¡que todos somos iguales!!!, vaya logro. Parece una novela de Almodóvar encontrar en esta situación algo positivo. 

“Es un 24 de Marzo creativo. Puede que me alcance el virus, puede que me mate. Pero mis ideales están intactos. Queriendo de verdad, poder crecer con Justicia y Memoria”. 

“Solo puedo crear desde mi conciencia. Tenemos la posibilidad de hacernos escuchar, de poder lograr metas. De acompañar a nuestros enfrascados funcionarios para que los cimientos de nuestros compañeros queden plasmados hacia el futuro”. 

“No hay otra salida, debemos estar todos. Otra vez la esperanza demencial de que todo continúe”. 

“Que nuestros hijos, nuestros vecinos, nuestros familiares y nuestros dirigentes, tengan los mismos ideales que nuestros compañeros”. 

“Debemos tejer la sociedad. Lograr objetivos sociales importantes”. 

“Tenemos la necesidad, tenemos el espacio, tenemos compañeros de primera línea, tenemos herramientas para implementar; tenemos todos nuestros ideales por plasmar. Tenemos en quienes inspirarnos y tenemos a quienes delegar”. 

Muchas Gracias Soledad Vergara por compartir tu incansable ejemplo de lucha y militancia 

El regalo

Soledad nos comparte un fragmento que le pertenece su padre a propósito de una discusión que parece ser bastante antigua y que pretende instalar como agenda  una falsa premisa que intenta colocar a la Economía por sobre todo lo demás, aún por encima de la propia vida.

El nacimiento de una nueva era de la humanidad sólo será posible cuando la conciencia haya asumido para siempre (vale decir, con la suficiente firmeza como para impedir renunciamientos de importancia), la convicción del fracaso de la idea del crecimiento enloquecido de la economía. Este absurdo es impulsado, sin duda, por una ínfima minoría, fundamentalmente por la irresponsabilidad de las corporaciones ávidas de ganancias”.


En estos momentos en que las conversaciones parecieran retomar un lugar que había perdido profundidad y significancia; la historia hablada se vuelva un arma de trasvasamiento estratégico. Es ahí que radica el valor del compartir. Compartir viejas ideas que siguen siendo el fuego que enciende pasiones en la militancia de las nuevas generaciones.

Una vez más...Gracias compañera!!!