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Por las dudas, las certezas

En esta nota el autor resume las respuestas colectadas sobre una serie de dudas que muchos se plantean sobre el futuro de la sociedad a partir de la pandemia de Covid 19. Algunos de los supuestos planteados fueron: ¿Después del coronavirus cambiará el mundo o todo seguirá igual?; ¿Somos lo neuquino o somos lo nacional? A continuación las conclusiones.


Por Marcelo Medrano

La semana pasada envié por WhatsApp un conjunto de pensamientos e ideas con el título “Por las Dudas, las Certezas”. Imposible reeditarlo aquí por razones de espacio. Lo envié aproximadamente a 120 personas. Las contestaciones fueron cerca de 90. Representativas de distintas posiciones, aportes y sugerencias de discusión y debate. 

Lo que sigue a continuación, surge de mi visión de observador de respuestas, sin pretensiones de objetividad ni análisis estadístico. Debe ser tomado como un simple aporte. Con la siguiente previsión. Con casi la totalidad de los destinatarios mantengo una cercanía social y humana, para tener en cuenta el sesgo característico. Los que contestaron, trabajan, accionan o participan en organizaciones políticas, sociales y de Derechos Humanos, espacios de militancia social, docencia, artísticos y comunicación social, Poder Ejecutivo, Legislativo, Judicial -mayormente de la Provincia de Neuquén-, y lxs que se desempeñan en la faz de gestión privada, vinculados a actividades comerciales, jurídicas y de la salud. Es decir una gran diversidad vinculados a espacios de incidencia pública.

El primer eje disparador se denominaba: "ADELANTE LA TRANSFORMACION/TODO SEGUIRA IGUAL". 

Surgió de varios aportes, con claridad la cuestión de la comunicación formal -medios de comunicación tradicionales- e informal -más individuales-, y su poderío para mediar la información y los estados de ánimo. En este sentido, aparece la dialéctica entre libertad de expresión y derecho a la información veraz. Dialéctica agigantada creo ver, por la situación de pandemia que exigiría mayor rigurosidad en la información. Surge de este modo, nuevamente el poder de los medios concentrados, sus expresiones sesgadas e interesadas; pero también toda la red de relaciones interpersonales con sus facetas tanto de empatía y solidaridad como de odio y violencia. Sencillamente, siendo que la comunicación social va modificándose permanentemente, pero en pandemia cobra una centralidad esencial, qué comunicar, cómo hacerlo, cómo relacionarse y el efecto sobre las emociones resulta de relevancia sustancial. Pensando en una libertad de expresión absoluta o limitantes en relación a información desde otro paradigma. 

La "libertad de prensa" defiende un derecho de los medios ante el Estado, desde finales del siglo XVIII. El "derecho a la información veraz" defiende al ciudadano ante la mediocracia: es un nuevo derecho... ante la información encubridora, falaz, mentirosa, tendenciosa.

Cita contundente a la hora de abrir el debate y discutir transformaciones. 

Tema a pensar y trabajar, pero no menor. Recordemos que, más allá que la libertad de expresión constituye uno de los derechos/garantías esenciales del sistema democrático, el sistema de medios es también un catalizador de opinión pública o el denominado sentido común (términos discutibles pero que todos comprendemos). Sin olvidar tampoco su enorme poderío, que venimos trabajando no como algo ajeno a la política sino parte constituyente. 

El segundo eje, llevaba por título "SOMOS LA NACIÓN/SOMOS LO LOCAL".

Hubo respuestas con mayor divergencia, mediadas claramente, por la mayor o menor afinidad con el gobierno nacional. Y, más complejo, desde el punto de vista institucional, cómo ir organizando y articulando, según posibilidades (humanas, de recursos económicos, reales y potenciales) los distintos ámbitos, local, provincial, nacional.

En cualquier caso, siempre el gobierno de proximidad -local en sentido amplio- es el que mejor conoce la realidad palpable y diaria y desde ya los rumbos posibles, si bien el gobierno nacional impulsa las grandes políticas estratégicas.

Los municipios en su rol de coordinadores de planes de desarrollo sustentables son prototipo de esta afirmación. El "cuanto más cerca mejor", en consonancia con un gobierno nacional y popular desde ya, puede ser un disparador esencial de las mejores posibilidades. 

Surgió tangencialmente también la cuestión acerca de los saberes de funcionarios en esquemas de decisión, referencias a designaciones y capacidades o mediocridades. Otro eje importante de discusión acerca de los perfiles del funcionariado, qué deben saber, cómo escuchar y controles a sus decisiones por parte del pueblo. Controles y rendiciones de cuentas, además de mecanismos directos de construcción y acción política.

En relación al tercer eje, que refería a "PROTOCOLO DE PROTOCOLOS".

Surgieron respuestas muy heterogéneas y difíciles de aglutinar. Con esfuerzo pueden detectarse tres puntos comunes.

El primero vinculado a la organización política. Tradicional -por partidos- o frente a nuevas esferas de organización en relación a territorios o temas afines. Y la cuestión de la mediación entre demandas populares y quienes toman las decisiones en última instancia.

El segundo punto resultó una referencia a la educación. La palabra educación fue una de las más citadas. Una especie de pilar esencial para posibilitar transformaciones. Las dificultades pasan por cómo se organiza tal sistema educativo evitando las exclusiones de hecho, y sobre todo cuales deben ser los contenidos comunes que conforman la plataforma básica de saberes para un pequeño o gran mundo más justo y equitativo.

El tercero a la cuestión de las lógicas de acuerdos y no de confrontación, en relación exclusivamente a los poderes de la Provincia de Neuquén. Aquí las respuestas mayormente coinciden en que el Ejecutivo actúa y es cuestionado o no en términos generales, y el tiempo de pandemia abrió también un paréntesis en las habituales lógicas de gestión. Resultando también que es de quién se espera el mayor protagonismo.

Dificultades en el Legislativo para poder acordar, detecto de varias respuestas que es donde se provoca la mayor tensión política y la lógica de acuerdos resultará dificultosa, por cuanto es tal vez donde se da con mayor transparencia el campo de disputas de posiciones. Aquí existe un a priori, no de ahora, que dependiendo que diputadx/bloque realice la propuesta, está predeterminada la posición y la posibilidad o no que triunfe tal posición. Nada nuevo, pero si importante en atención a lógicas de gestión de conflictividad y no levanta manos automáticas. 

Y por último en relación al Poder Judicial, el mayor inconveniente, diría que vinculado a su identidad. No está claro cómo debe intervenir y desde que lugar. Poder del Estado, Servicio de Justicia. Siempre cuestionado, a veces abstracto y difuso, identidad borrosa. Siempre vigente poder reflexionar acerca de su papel -al menos en relación al conflicto y la violencia- en tiempos actuales. Quizás exista oportunidad, tangible, para transformar y mejorar, conscientes, con sus diversas responsabilidades lógico, que sus acciones u omisiones impactan en quienes acceden o no a la justicia. El Poder Judicial -empleados y magistrados y funcionarios- junto a lxs abogadxs, resolviendo, acordando, y reflexionando los cambios necesarios, como uno de los sujetos que debe dar respuesta. Ya existe lo corporativo como para agregarle lo sectorial. 

Y por último surgieron dos ejes transversales.

Muchxs se detuvieron en la referencia a todas las voces, sosteniendo que las mejores decisiones y acuerdos deben ser con la participación de la mayor cantidad de interesados/afectados en cualquier tema. 

Igualmente, hubo reflexiones y pensamientos en torno a algo que para mí resulta de toda evidencia, y diría que central internalizar. Este punto en particular no está atado a las respuestas sino a una composición propia. Creo que falta trabajar e incorporar que las grandes decisiones políticas democráticas (hacia dónde vamos y de qué manera) es la base sobre la que deben asentarse las políticas públicas y la respectiva institucionalidad. Y qué esas decisiones trascendentales son las que generan las subjetividades colectivas integradas. En términos más simples. Si definimos que no puede haber persona alguna que no tenga dignidad (comida, salud, educación, casa, tiempo libre y aspiraciones) todas las políticas públicas que contradigan tal principio deben ser rechazadas de plano, la institucionalidad motora será afín -a procurar real dignidad-, y la vinculación confirma y sustenta el colectivo; todxs sabemos hacia dónde vamos. Las políticas públicas no son neutrales, favorecen u obstaculizan las racionalidades y van construyendo las subjetividades. 

El cuarto eje, planteaba: "OTRAS CATEGORIAS: INGENUIDAD/AMOR COMO CONSTRUCCION POLITICA".

Aquí puedo decir que casi sin excepción todxs se refirieron al tema. Surgieron varios ejes en diversas dimensiones. Como desafío político, trabajar desde principios y valores y acentuar la cuestión de las sociedades decentes, éticas. 

Muchxs se refirieron a la responsabilidad intergeneracional, en el entendimiento que las desigualdades se transmiten, también, inter generacionalmente.

Resultó también que fue en este punto donde las opiniones se intensificaron, en relación al acontecimiento (en concepción filosófica) pandemia. Se está operando la transformación y la oportunidad de transformar es necesaria, posible, perceptible. Y posición acerca de que la pandemia solo revela con mayor visibilidad el mundo social, nada cambiará, quienes son solidarios seguirán siéndolo y quienes no lo son, acentuarán el individualismo. Especie de tres posiciones, será mejor, será igual, será peor. De todos modos, todxs sin excepción opinaron que lucharán por lo mejor posible. 

Hubo para terminar, respuestas tremendamente profundas; existenciales. Surgieron el arte, el lenguaje, las microacciones, sus efectos, continuidades; la felicidad, las convicciones, los colectivos, el amor a uno mismo y a lxs demás. 

Terminaba aquel escrito compartido, con esta cita: "En la película argentina "La Guardería", me estallan estas palabras: "...atravesar lo colectivo es sentir que o somos felices todos o no es feliz nadie, o hay para todos o no hay para nadie, ese concepto de justicia y de igualdad". 

La mayoría se refirió a ella. Por extremadamente justa, política y emotiva. Esas palabras las dijo en la película Fernanda Raverta. En medio que circularan las contestaciones, ella fue designada Directora, nada menos que de la Anses. Algunxs pueden ver en ello una señal. Otrxs, que quién expresó tal pensamiento, conduzca ese organismo es la más plena representación que las transformaciones suceden, en la más genuina caracterización de la política. 

8.- FINAL DEL INICIO.

Siempre digo final del inicio. Lo que aquí lean es el final de este primario campo de construcción colectiva. Soy un simple traductor de los pensamientos e ideas que se volcaron. Es una sencilla circulación de ideas desde mi mirada. Como quién se tomó el trabajo de pensar uno a uno cada párrafo del escrito, y al final escribió: “No es un mensaje esperanzador el mío, y aunque se supone que sea una respuesta, son más los interrogantes. Pero ese es mi leitmotiv, la duda como única certeza”.

Desde esa duda, tomar de aquí lo que sirva, lo que pueda continuarse, lo que deba trabajarse, militarse, sentirse. Y en medio seguir haciendo, generando. Transformando.

Actrices y actores Sentipensantes.


















Fuente: VCF